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Trayectoria Eclesial

Sr. Pbro. Dr. César Augusto Dávila G.

DE LA ARQUIDIÓCESIS DE QUITO

Antepenúltimo de los hijos del matrimonio del señor Augusto Dávila y señora Vicenta Gavilanes, nació en Patate, provincia del Tungurahua el primero de noviembre de 1910 y fue bautizado en Pelileo seis días después por el Rmo. Señor Canónigo Luis Leopoldo Terán. Cursó sus primeros estudios en la Escuela Católica “Benjamín Araujo” y desde el tercer año continuó hasta el quinto en la escuela fiscal cuyo Director fue el Señor Marcial Soria, eximio modelador de la niñez. A los once años ingresó en el Seminario Menor de Atocha (Ambato) para continuar desde el cuarto año en el Seminario Menor de San Luis de Quito en donde terminó sus estudios de enseñanza secundaria. El 6 de Octubre de 1928 ingresó al Seminario Mayor San José de Quito; el 25 de julio de 1931 recibió la Primera Tonsura; el 6 de Marzo y 25 de Junio del año siguiente las Ordenes Menores; el 28 de enero de 1934 el Subdiaconado; el 4 de febrero de mismo año el Diaconado; por fin el 29 de junio de 1934 recibió la unción sacerdotal ycelebró su Primera Misa rezada ante el Cuadro del Milagro de la Dolorosa del Colegio en San Gabriel de Quito; su Primera Misa cantada en su pueblo natal.

COADJUTOR.- El 2 de julio de 1934 fue nombrado Coadjutor de Ambato; el 8 de febrero del año siguiente pasó a Pelileo con el mismo cargo.

PÁRROCO DE CHUGCHILÁN, PILALÓ Y PIFO.- El 1° de junio de 1936 recibió en Pelileo el nombramiento de Cura interino de Chugchilán y Pilaló; seis meses más tarde pasó a residir en Pilaló. El 6 de junio de 1937 fue nombrado Cura interino de Pifo en donde colocó la primera piedra de la planta eléctrica y celebró la misa campal en la inauguración de la misma.

EN LA PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA.- Obtenido el permiso de su Superior Jerárquico y con suspropios medios, se dirigió a Bogotá el 28 de febrero de 1941 y se matriculó en la Pontificia Universidad Javeriana para seguir estudios superiores de Teología. En Bogotá permaneció hasta el 4 de septiembre de1947. Aprovechó de su permanencia en la Universidad para seguir un Curso complementario de Periodismo y de Pedagogía. Obtuvo el grado de Licenciado el 8 de diciembre de 1943. Previamente presentó su trabajo sobre LA IDENTIDAD DE LOS CUERPOS QUE MUEREN Y RESUCITAN. Está inédito. La laurea de Doctor obtuvo el 25 de febrero de 1947, siendo sus examinadores los Jesuitas: Luis Carlos Ramírez, Efraín Zuloaga, Alberto Campillo, Guillermo González y Fernando Velásquez. Asistió al grado el Excmo. Sr. Embajador del Ecuador Doctor Augusto Velasco Montesdeoca y la colonia ecuatoriana. Fue aprobado MAGNA CUM LAUDE, como consta del acta XII de la Universidad fechada el 25 de febrero de 1947. El Diario El Siglo de Bogotá del 28 de febrero de 1947 decía:

“El día 25 del presente, con lujo de competencia obtuvo su título de Doctor en Sagrada Teología, en las Facultades Eclesiásticas de la Pontificia Universidad Javeriana el prestante Sacerdote de la Arquidiócesis de Quito, presbítero César A. Dávila. Su tesis de grado es un trabajo eminente, azas difícil y especulativo en el que estudia la doctrina católica sobre la concupiscencia según la mente del Grande Doctor de Aquino. Ampliamente documentado con todos los comentarios del Aquínate y en impecable estilo estrictamente escolástico, penetra certeramente y con pluma maestra en las difíciles cuestiones sobre la fatal herencia del pecado de origen, orientado por las sabias enseñanzas de la más grande lumbrera teológica del sigo XIII, cuyas doctrinas analiza con profundidad y sutileza, sobre todo al fijar la sentencia, para muchos nuevos, en que el de Aquino coloca a la Concupiscencia como elemento cuasi-material del pecado, sin quitarle por eso la condición de secuela del  pecado original originante. Ni carece de utilidad práctica, a pesar de su carácter especulativo, pues da un golpe mortal a las teorías freudianas, que con ropaje de novedad tratan de invadir las orientaciones Pedagógicas modernas. Vaya un voto de aplauso y sincera felicitación al nuevo Doctor, a sus familiares y a la Iglesia Ecuatoriana por el triunfo obtenido a base de inteligencia y laboriosidad. Que sea para mayor gloria de Dios”.

Los diarios La Razón del 25 de febrero y El Liberal del 26 del mismo año hicieron también elogiosos comentarios.

Su tesis consta de diez capítulos y tiene unas setecientas notas. Ha publicado sólo el Capítulo séptimo.

EN LA ARQUIÓCESIS DE QUITO.- Desde el mes de octubre de 1947 a su regreso de Bogotá fue nombrado párroco de San Marcos en Quito y renunció a este cargo en marzo de 1951.

ACTIVIDADES EN LA RADIO.- Con su propio peculio fundó en San Marcos la primera estación Católica de Radiodifusión. Sostenía en ella un Radio-periódico con sus propios editoriales y comentarios. Esta novedad le atrajo no pocas dificultades en un ambiente nada acostumbrado aún a las innovaciones. Muchos sin embargo recuerdan hasta hoy la obra realizada. El 21 de diciembre de 1951 se le entregó un valioso Acuerdo publicado en El Ecuatoriano del 28 del mismo mes y año y que dice en uno de sus párrafos:

“Al Doctor César A. Dávila no le ha satisfecho sembrar la semilla del Evangelio desde la Cátedra Sagrada y comprendiendo que la voz del sacerdote debe llegar también hasta el último rincón de los hogares cristianos, con su talento y corazón ha fundado con sus propios medios y ha organizado la Radiodifusora “Luz de América”, antena del pensamiento y enjambre de virtudes, cultura y civismo. En esta labor se halla empeñado, pese a la incomprensión de quienes debían estimularle y aprovechar su talento, sus ejecutorías de su vasta ilustración y su excelente preparación en los campos del saber religioso y profano”.

JUEZ PROSINODAL.- El 4 de diciembre de 1947 fue nombrado Juez Prosinodal de la Arquidiócesis de Quito.

PÁRROCO DE POMASQUI, SAN JOSÉ DE MINAS Y ZÁMBIZA.- En octubre de 1952 fue nombrado Párroco de Pomasqui; el 16 de marzo de 1954 pasó con el mismo cargo a San José de Minas. Renunció está última parroquia el 9 de octubre de 1957. De su labor decía su Superior al Rmo. Sr. Canónigo Pedro Luis Calero encarta fechada el 14 de octubre de 1954:

“Agradezco mucho a V. S. los importantes servicios prestados en San José de Minas y los consoladores informes que se sirve darme sobre los trabajos de orden espiritual y material llevados a cabo por el actual venerable señor Cura. Que Dios sea Bendito”.

En un acuerdo entregado por los pobladores de San José de Minas y publicado en la Revista La Merced N°73 y 74 se dice: “Realizó entre otras las siguientes obras: Traída de misiones cada año, solicitud para la venida anualmente de los RR. PP. Jesuitas para los catecismos y Primeras Comuniones, terminación de las cuatro últimas bóvedas de la Iglesia, construcción de la primera Torre, dotación de una planta eléctrica, magnífico pretil…” 

ESCRITOR.- Son centenares los artículos, notas, comentarios, disertaciones, estudios que ha escrito en Revistas, periódicos, diarios y semanarios nacionales y extranjeros. Su actividad literaria se remonta al Seminario Mayor. Siendo seminarista publicó varias poesías en la revista Mi Seminario y su primera Oda al Seminario en las Bodas de Oro de su fundación aparecida en El Debate del 7 de mayo de 1933. En los momentos más graves y difíciles para el Ecuador, escribía todos los editoriales del diario La Patria, desde abril de 1948 cuando fue desplazado el Doctor Manuel Elicio Flor de la Presidencia de la República (triunfó Galo Plaza Lasso). Sus comentarios versan sobre temas muy variados como son: Los escritos de Pio XII, Ascética y Mística, El Mensaje de Nuestra Señora de la Elevación, la Rusia de nuestros días, el laicismo de la Constitución y la Doctrina Católica, réplica al jesuita Carlos María Staelin de las apreciaciones de su libro “Apariciones” sobre el Milagro de la Dolorosa, etc., etc. Hoy colabora en el Semanario “Meridiano”.

La Dirección de la Revista La Merced en la página 5 del número 76 correspondiente a febrero del año pasado dice: “Desde febrero de 1953, con entusiasmo ha recibido La Merced las doctas y profundamente meditadas producciones del enorme talento del Doctor Dávila. Sus artículos de factura filosófica, de orientación doctrinaria y de alta comprensión de los complejos problemas que vivimos, son leídos y varios de ellos reproducidos en Revistas del exterior, donde se le admira cariñosamente a este sacerdote, honra del clero ecuatoriano”.

Ha publicado también dos novenas: La una al Señor del Árbol siendo párroco de Pomasqui, la otra a la Virgen de la Caridad cuando fue párroco de San José de Minas.

PROFESOR.- En Bogotá fue profesor de Filosofía del Instituto Politécnico del Doctor Carlos Lleras A. y del Colegio Nuestra Señora de Lourdes. Tambien se ha desempeñado como profesor de Filosofía y Religión en el Colegio San Pedro Pascual de los PP. Mercedarios de Quito.

BODAS DE PLATA SACERDOTALES, 29 de junio 1934-29 de junio 1959 Publicación de la Arquidiócesis de Quito Editorial Tirso de Molina Quito, 1959

 

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P. Dávila (Le Crucificaron)